- El joven acosado en el instituto por ser homosexual declara ante la Fiscalía
- El instituto señala que se le ordenó no hablar con la familia durante la investigación
- El País, 2005-02-19 # A. Coullaut . Sevilla
El jefe de estudios del centro educativo, Juan Antonio González, afirmó ayer que el centro ha seguido el caso "constantemente", que recibieron órdenes de "superiores para actuar con total confidencialidad" y que el menor dejó de acudir a clase el pasado 11 de diciembre. "Ése es el primer día en que tenemos constancia de que pasa algo, antes Víctor no se había quejado ni habíamos notado nada aunque desde el principio reconoció abiertamente su homosexualidad. Después, el 15 de diciembre se presentó con su madre y dos asistentes de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Almensilla y nos contó lo que pasaba. Les dijimos que era imposible en ese momento comenzar una investigación porque llegaban las vacaciones, aunque nos pusimos a ello a la vuelta, en enero. Informamos a superiores y tanto desde la Delegación Provincial de Educación como desde la Fiscalía de Menores nos prohibieron hablar del tema. También recibimos la orden expresa de no ponernos en contacto con la familia afectada hasta hace muy poco. Ahora ya tenemos el visto bueno y hemos podido hablar con ellos".
González señaló que en la primera reunión la madre del menor les alertó que su hijo recibía "graves amenazas" en su correo electrónico. Unas amenazas que confirmó ayer María Luisa Gómez en la capital andaluza. "Mi hijo ha sufrido acoso psicológico, insultos, vejaciones y amenazas de muerte a través de los mensajes en el ordenador, está en un estado de ánimo muy malo por el único motivo de haber reconocido abiertamente su condición de homosexual".
El jefe de estudios señaló que "el 18 de enero vino la policía científica y el grupo Emune de la Guardia Civil ha tomar declaraciones y para averiguar las amenazas en los correos, nosotros no tenemos medios para hacer eso". Añadió que "a finales de enero remitimos un informe de ocho páginas al delegado provincial de Educación, Jaime Mougán, con las declaraciones de los alumnos con versiones dispares y los datos recabados". "Después", prosigue González, "los informes por escrito o verbales han sido constantes y están en manos de la Delegación Provincial de Educación de Sevilla". La madre del menor, María Luisa Gómez, denunció el presunto acoso el pasado 8 de febrero en el programa de televisión Siete Lunas, de Canal Sur, algo que provocó "malestar" en el centro que optó por colgar una nota en su web en el que explicaban que el instituto "estaba investigando el caso".
"Este pasado miércoles", prosigue el jefe de estudios, "cuatro alumnos de la misma clase que Víctor, chicos entre 15 y 17 años, recibieron la denuncia de la Fiscalía".
El presidente de Colega Sevilla, la Federación de Asociaciones de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales, Pablo Morterero, declaró ayer que el delegado provincial de Educación les había informado de lo que pasaba en el instituto de Coria del Río, "hace un par de semanas, aunque la familia no se ha puesto en contacto con nosotros". Morterero abogó por la prevención y por los programas de mediación antes de que "las cosas se judicializen". "Al final, el juez puede poner una pena de internamiento o trabajos comunitarios aunque eso no arregla el problema de fondo porque se olvida después. El tema que nos preocupa es trasladar a las aulas la prevención en valores".
Una prevención que se ha llevado a cabo en el instituto sevillano, según Juan Antonio González. "Tras el caso de Jokin [el joven de 14 años que se suicidó en Guipúzcoa en septiembre de 2004 por las vejaciones que sufría en el instituto], nos pasamos por las clases, insistimos que si sentían una situación de acoso lo investigaríamos", aclaró González.
Morterero y fuentes de la Delegación Provincial de Educación negaron que conociesen otro caso de acoso escolar a alumnos por su orientación sexual en Sevilla. En un comunicado, la delegación provincial señaló que "una vez abierta por al Fiscalía de Menores diligencias en torno a este caso, esta delegación, no puede por menos que mostrar su colaboración y apoyo en este proceso a dicha Administración y hasta tanto no culmine el proceso judicial en marcha, los jóvenes supuestamente implicados tienen el mismo derecho a la protección de su intimidad que cualquier otro menor de edad".