- Una mesa redonda aborda en Cáceres la percepción de la homosexualidad en las sociedades española y portuguesa
- Extremadura al Día, 2006-10-24
El debate ha estado moderado por el presidente de la Fundación Triángulo en Extremadura, José María Núñez, quien destacó el carácter de los ponentes como “personas comprometidas con la igualdad de los ciudadanos, independientemente de su condición sexual”.
Núñez ha indicado que “el desarrollo no sólo viene de la economía, sino también de que podamos amarnos” y de que “Portugal y España puedan darse un abrazo muy fuerte”.
El Pesidente de Honor de la Coordinadora Gay Lesbiana de Cataluña, Jordi Petit, ha abierto el turno de intervenciones refiriéndose a cómo, al final del franquismo, la moral católica dominaba la percepción social sobre este colectivo, hasta tal punto que el 80% de la población era partidario de erradicar la homosexualidad. ''Una dinámica de rechazo que se invirtió con la muerte del dictador, debido al interés por lo que había estado prohibido''.
En ese marco, señala Petit, entra el movimiento homosexual “como una condición necesaria de democracia”. Jordi Petit ha indicado que en 1983 se produjo un vuelco tremendo de la homosexualidad, gracias a Televisión Española, que empezó a emitir debates, coloquios y entrevistas abordando abiertamente este tema.
Por su parte, la investigadora de la Universidad de Coimbra, Ana Cristina Santos, ha hablado del movimiento LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales) de su país. Santos ha aludido al carácter conservador de la sociedad portuguesa, que, sin embargo, ha ido abriéndose a la nueva realidad:''si en 1998 sólo un 14,3% de los portugueses aprobaban las relaciones homosexuales, en 2005 ese porcentaje se había incrementado hasta el 51%''.
Como causas de esta transformación, la experta portuguesa ha apuntado una mayor visibilidad de los colectivos LGBT, la multiplicación de reivindicaciones, y una pedagogía activa, con un papel fundamental de las instituciones educativas. Ana Cristina Santos ha destacado que los no creyentes toleran mucho mejor que los creyentes las relaciones gays y lésbicas, y que la homofobia aumenta a medida que disminuye el nivel de formación.
El secretario y ex presidente del colectivo ILGA (International Gay and Lesbian Association) en Portugal, Paulo Corte Real, ha puesto de relieve que España y Portugal tienen más semejanzas que diferencias en esta materia, aunque en el país vecino aún no se ha aprobado el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Una práctica que, ha subrayado, “no cohíbe la libertad de los demás”. Corte Real ha mencionado una nueva ley que permite a las parejas lésbicas la procreación médica asistida, y que ha aumentado las reivindicaciones de igualdad. A su juicio, la sociedad portuguesa todavía no ha interiorizado el papel que debe cumplir en esa lucha. También se ha mostrado crítico con quienes toleran la homofobia, lo cual, ha dicho, “equivale a promoverla”.
Por su parte, la presidenta de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales (FELGT), Beatriz Gimeno, ha resaltado la importancia de la ley del matrimonio homosexual, que contó con una aprobación social superior al 65%, aunque cree que el verdadero logro de estos colectivos es el vuelco radical de la percepción de gays y lesbianas en España en los últimos 30 años.
Un logro que Gimeno atribuye a la creación de un debate social previo que “ya estaba ganado”. La activista considera importante que se trabaje en la visibilidad de estos movimientos, y en su penetración social, y ha señalado la igualdad, la ciudadanía plena y la dignidad como conceptos fundamentales en esta lucha. Beatriz Gimeno considera que “nos vino bien que la izquierda hiciera suyo este discurso”, y entiende que “esta revolución es perfectamente factible en cualquier país de la Unión Europea”.
El último en tomar la palabra ha sido el Secretario de Movimientos Sociales y relaciones con las ONGs del PSOE, Pedro Zerolo, que ha comenzado afirmando que “las fronteras no deben existir nunca”, y que “los hombres y las mujeres que nos construimos desde la izquierda no somos nacionalistas: somos internacionalistas, porque nos interesa lo que le pase a un gay, a una lesbiana o a un transexual en cualquier lugar del mundo, que siguen muriendo a cientos sólo por el hecho de serlo”.
Zerolo ha señalado que “han sido muchos años de lucha”; una lucha que entiende como “política, revolucionaria, reformadora y transgresora”. Bajo su punto de vista, que él mismo ha definido como “optimismo demencial”, vivimos un momento histórico, que hay que aprovechar y vender bien.
Pedro Zerolo cree que los españoles debemos sentirnos orgullosos por estar a la cabeza en el reconocimiento de los derechos de lesbianas y gays, y haber podido eliminar la discriminación contra estos colectivos. Por último, se ha referido a la “política valiente” del gobierno de Zapatero en este asunto, y ha destacado el protagonismo de la ciudadanía en este cambio: “un voto”, ha dicho, “vale una lucha”, y, ha añadido que “hemos cambiado un poquito el mundo”.
Estreno documental "Fora da lei"
Tras las intervenciones se abrió un debate que contó con la participación del público, que llenaba la sala de proyecciones de la filmoteca de Extremadura.
Finalizada la mesa redonda, asistieron al estreno del documental “Fora da Lei”, que presentó su directora, Leonor de Areal, y que cuenta las dificultades de integración y aceptación social por las que tuvo que pasar una pareja de lesbianas portuguesas.