- Imanol Alvarez · Miembro de EHGAM
«Es un ejercicio de cinismo decir que se defienden los derechos del menor» - Gara, 2004-12-01
El Tribunal Constitucional español decidió el pasado 1 de enero mantener la suspensión del artículo octavo de la Ley de parejas de hecho aprobada el 7 de mayo de 2003 en el Parlamento de Gasteiz y que fue recurrida por el Gobierno español al considerar que excedía las competencias de Lakua.
En su recurso de inconstitucionalidad, el Ejecutivo de José María Aznar estimaba que la ley contempla aspectos sustantivos no regulados previamente en el Derecho Civil de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa en lo que respecta a la adopción de niños por parte de parejas homosexuales.
¿Qué valoración hace EHGAM de la decisión adoptada recientemente por el Tribunal Constitucional en lo que al artículo octavo de la Ley de parejas de hecho se refiere?
No nos ha extrañado en absoluto, ya que todos sabemos cuál es la composición del Tribunal Constitucional. La mayoría de los jueces que componen este órgano están elegidos por el PP,
un partido que además de ser de extrema derecha, es de corte claramente liberticida. Por esto, precisamente, nos parece normal que empleen todas sus fuerzas para intentar acabar con todas y cada una de las libertades individuales y colectivas. No nos ha sorprendido la decisión adoptada por el Tribunal Constitucional. Sin embargo, siempre nos queda un resquicio para el optimismo. Nos gustaría pensar que, a lo mejor, esta vez nos equivocamos y los jueces toman otra decisión.
Uno de los argumentos esgrimidos por el Tribunal Constitucional es que este artículo excede las competencias de Lakua.
Aunque nosotros no somos juristas, desde un principio ya sabíamos que iba a haber un conflicto de competencias. Nos gustaría que eso se resolviera de la mejor manera posible y siempre a favor de nuestros intereses.
Asimismo, argumentan que toman esta decisión para «defender el interés del menor».
Así es, utilizan como pretexto a los niños. Hasta hace bien poco el PP y el mundo cercano a esa ideología defendía que todas las personas no son iguales. En este sentido, manifestaban que los homosexuales no tenían por qué tener los mismos derechos que los demás. Para no hacer el ridículo ante la sociedad, ahora se han buscado una nueva excusa, que no es otra que decir que defienden los derechos de los niños, algo que nosotros también hacemos. Los derechos de los
menores se fundamentan en recibir una buena educación, en ser protegidos de forma adecuada y en ser amados por las personas que tomen esta responsabilidad. Bien poco importa que la pareja en cuestión sea homosexual o heterosexual. El Tribunal Constitucional y el Gobierno español hacen un ejercicio de cinismo al decir que defienden al menor. Es más, diferentes estudios realizados tanto en Estados Unidos como en la Comunidad Autónoma de Madrid demuestran que los niños salen más equilibrados cuando son educados por parejas homosexuales.
¿Tiene previsto realizar el colectivo de gays y lesbianas de Euskal Herria algún tipo de protesta ante esta decisión que han tomado los tribunales españoles?
De manera unitaria no se ha tomado ninguna determinación. No obstante, está claro que vamos a seguir haciendo presión. En lo que a las medidas legales respecta, sin embargo, no sé lo
que se puede hacer. Este es un tema que tenemos que estudiar, algo que, EHGAM como tal, todavía no ha realizado. Desconocemos si algún otro grupo lo está haciendo.
¿Qué opinión le merecen las últimas declaraciones realizadas por el presidente de la Conferencia Episcopal española, Antonio María Rouco Varela, en las que decía que «cuando se ignora la verdad del matrimonio indisoluble del varón y la mujer y se equipara a las uniones de todo tipo, la consecuencia es que se multiplica el dolor de los niños por la pérdida del insustituible ambiente familiar»?
Independientemente de la Ley de parejas de hecho, la Iglesia católica está haciendo un llamamiento a la discriminación. Declaraciones como las de Rouco Varela son atentatorias contra la Constitución española y el Código Penal. Aunque a veces nos hemos planteado llevar a cabo medidas legales contra la Iglesia, al final siempre lo hemos descartado ante las pocas posibilidades de éxito que tenemos.
Es indudable que la Iglesia actual es ultraconservadora a más no poder. Ahí está, por ejemplo, la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Así es. Esta Congregación, con el señor Ratzinger a la cabeza, dijo en su momento que no era de recibo que los homosexuales fueran profesores, monitores deportivos... Es decir, directa o indirectamente, estaba llamando a la discriminación laboral de estas personas. Si esto no es
anticonstitucional, ¿qué es?; si no es homofobia, ¿qué es?
¿Cuáles son sus deseos de cara al futuro?
Quiero ser optimista y pensar que el PP volverá a ser en Euskal Herria una fuerza residual. Aunque en el Estado español es más difícil que esto ocurra, quisiera que, en lo que a la
homosexualidad se refiere, el PSOE sea consecuente con lo que ha estado diciendo en estos años que ha estado en la oposición. Me gustaría que se dieran avances en todos los temas que que afectan a gays y lesbianas, incluido el que se refiere a la adopción. No cabe duda de que nosotros vamos a luchar por ello.