- Por la diversidad, todas las familias importan
- El Diario Vasco, 2006-07-10 # Koldobike Jauregi, Sergio Iñiguez · Coordinadora y coordinador de Gehitu
Durante estos días será imposible que nos olvidemos de la presencia de Benedicto XVI en Valencia. El Papa visita la ciudad del Turia para clausurar los V Encuentros Mundiales de la Familia. No hace falta ser adivino para pronosticar cuál será el mensaje que el señor Ratzinger lanzará a los allí congregados y a los medios de comunicación: familia solo hay una; el matrimonio canónico contraído entre hombre y mujer con su descendencia legítima. Fuera de este mensaje quedarán más del 50% de los hogares vascos que, según los últimos sondeos, son diversos, plurales y distintos al denominado modelo tradicional de familia. La jerarquía de la Iglesia Católica con Ratzinger a la cabeza se intentan apropiar del concepto de familia en exclusiva, utilizándolo como arma de ataque contra la diversidad, la variedad y la pluralidad.
Desde Gehitu y desde un sinfín de asociaciones y familias plurales y diversas hacemos oír nuestra voz para reivindicar un concepto amplio e incluyente del concepto de familia. Hace unas semanas se celebraban en la Universidad de Valencia las I Jornadas de Diversidad Familiar en Europa, allí tuvimos la inmensa suerte de presenciar la magistral conferencia de María del Mar González, profesora de la Psicología Evolutiva y de la Educación de la Universidad de Sevilla, y una de las mayores expertas en diversidad familiar de nuestro entorno. Trataremos aquí de hacer llegar las principales conclusiones de su conferencia puesto que nos parecen de gran interés.
La exposición de María del Mar que bajo el título Fortalezas y debilidades de las familias homoparentales eran las conclusiones de sus últimos años de estudio sobre la realidad de las familias homoparentales constituidas por dos madres, dos padres o por madres o padres solteros y de orientación homosexual.
En primer lugar y como conclusión clave de estos estudios es que las familias homoparentales son espacios adecuados para el desarrollo de los menores. Esta conclusión se extrae del análisis de los criterios para la idoneidad en procesos de adopción (perfiles personales sanos y ajustados, capacidades educativas adecuadas, dinámica familiar saludable y apoyo social suficiente) que al ser aplicados a familias homoparentales demuestran la idoneidad de estas familias.
En la exposición María del Mar González comentaba que cada nuevo modelo familiar que ha surgido a lo largo de la historia se ha encontrado con obstáculos y problemas específicos ante los que aparecen dos alternativas, por un lado se pueden convertir en potenciales debilidades que si se conocen y si se abordan pueden derivar en fortalezas potenciales. Por otro lado, los obstáculos y problemas pueden derivar en nuevas soluciones y oportunidades de desarrollo que se convertirían así en fortalezas.
Desde este punto de partida nos encontramos las siguientes debilidades en las familias homoparentales: los ligados a la integración de la homosexualidad de padres o madres. Para un adecuado desarrollo psicológico de los padres o madres es conveniente una adecuada asunción de la propia orientación sexual. En las entrevistas que sustentan los trabajos de María del Mar González, padres y madres destacan que antes de realizar el proceso de adopción han necesitado tener integrada de forma normalizada su homosexualidad.
Posibles reacciones homófobas del entorno. Ante esta debilidad existen herramientas de trabajo implementadas por las familias: por un lado, la revelación del modelo familiar, es decir, a quién decir, cómo y cuándo que se es familia homoparental. Por otro lado, el dotar de herramientas ante posibles reacciones homófobas: la primera de ellas sería advertir de estas posibles reacciones y a continuación explicar alternativas: ignorarlas, discutirlas o razonarlas.
Ausencia de legitimidad. Este punto puede que actualmente ya se encuentre desfasado puesto que se debía a la ausencia de cualquier tipo de regulación jurídica que reconociese y amparase los derechos de las familias homoparentales pero que desde la reforma del Código Civil en 2005 ya han visto legalmente reconocida su existencia.
Pero como comentábamos más arriba las debilidades se pueden convertir en potencialidades y en los mismos estudios aparecen una serie de elementos que en las familias homoparentales se convierten en fortalezas: la dificultad de acceso a la maternidad o paternidad de mujeres lesbianas y hombres gays provoca que nos encontremos ante familias constituidas tras una larga y profunda reflexión con lo que esto pueden conllevar de madurez, responsabilidad y seguridad a la hora de ejercer la paternidad o la maternidad.
Aprendizaje de roles de género igualitarios. Esto es: que en una pareja homoparental es difícil apreciar roles de género estereotipados y sí que se produce un reparto igualitario de las tareas domésticas y de trabajo por lo que se convierten en fuente de igualdad entre géneros y esto es aprendido de forma natural por los menores educados en estas familias.
Educación en la tolerancia. Como población discriminada durante siglos las familias homoparentales destacan, en estos estudios, por inculcar en los menores altas dosis de tolerancia hacia la diversidad como consecuencia de su propia experiencia.
Educación para vivir la sexualidad libremente. Unos de los ataques más frecuentes hacia las familias homoparentales se debe al temor que existe a que entre los menores educados exista mayor porcentaje de homosexuales. Todos los estudios concuerdan en que esto no es así. No es el caso que nos ocupa el exponer que no sería ningún problema el que esto fuese así, pero para tranquilidad de quién le atemorice esto insistimos, en las familias homoparentales nos encontramos con los mismos porcentajes de mujeres lesbianas y hombres gays que en el resto de familias.
Y tras este completo análisis de las familias homoparentales las conclusiones de María del Mar González fueron las siguientes:
- Que las familias homoparentales como cualquier modelo familia se encuentra frente a retos y debilidades específicos.
- Que la sociedad debe asumir responsabilidades para disminuir esos retos y debilidades a través de la protección legal de todas las familias (en marcha ya con la reforma del matrimonio) y formando al personal con responsabilidades en infancia y familia sobre la diversidad familiar.
- Por último, la sociedad puede aprender de las familias homoparentales los valores de igualdad, libertad y tolerancia que promueven las familias homoparentales.