- El Gobierno reduce un tercio las horas de religión en la secundaria obligatoria
- El proyecto de contenidos mínimos refuerza matemáticas y las asignaturas artísticas
- El País, 2006-10-31 # J.A. Aunión, Madrid
De lo que establecen los decretos de enseñanzas mínimas a las horas que efectivamente dan los alumnos de cada asignatura suele haber diferencia. Las comunidades autónomas tienen un margen de un 35% (45% en las autonomías con idioma propio) para completar ese horario. Así, normalmente, los estudiantes reciben más tiempo de clase del que regula el Gobierno como mínimo para todos. No es el caso de religión que, según un estudio de UGT, se ciñe a las horas mínimas en todas las comunidades menos en Galicia y Navarra.
El borrador de real decreto de las enseñanzas mínimas de secundaria, al que ha tenido acceso El País, ha reducido en un tercio el horario de la asignatura confesional para los cuatro cursos de la ESO, de las 210 horas actualmente en vigor hasta 140. Esto significaría perder 70 horas. Una clase a la semana equivale a 35 horas al año.
El Ministerio de Educación y la Conferencia Episcopal Española llevan varios meses negociando cómo se ofrecerá la asignatura de religión pero, de momento, no han llegado a un acuerdo. Los obispos dijeron recientemente que no estaban dispuestos a perder esta materia en ningún curso. La alternativa para los alumnos que rechacen la clase confesional ha estado siempre en el centro del debate. El cambio que introduce el borrador de real decreto en este sentido es el siguiente: se pasa de la obligación de ofrecer "una actividad de estudio" alternativa a la "debida atención educativa", exactamente el mismo cambio que se ha introducido para primaria (de 6 a 11 años).
Abandono del centro
Esto puede resultar ambiguo, pero la explicación que dieron fuentes cercanas al Gobierno cuando se conoció el decreto de primaria, es que los alumnos que no cursen religión podrían abandonar el centro durante esa hora. A diferencia del texto de primaria, sí se especifica en el de secundaria que las notas de religión no contarán para hacer media a la hora de pedir becas o acceder a pruebas selectivas en las que cuente esa nota media. El ministerio acaba de enviar este borrador de real decreto a las comunidades autónomas y se reunirá el próximo 7 de noviembre con los representantes autonómicos para debatirlo.
Al contrario que religión, matemáticas gana 50 horas en toda la secundaria, lo que vendría a representar 1,5 horas más semanales en alguno de los cursos. Todas las comunidades refuerzan actualmente esta asignatura sobre los mínimos que impone el Gobierno. Los alumnos de secundaria reciben ahora al menos 420 horas de matemáticas. El máximo lo dan los estudiantes riojanos: 560 horas.
Las materias artísticas también se refuerzan, aunque en menor medida. Tanto educación plástica y visual como música pasan de 70 horas a 105. En ambos casos, los estudiantes ya están recibiendo esas 105 horas con el complemento horario de las comunidades. En la mayoría de las autonomías se le dedica unas 210 horas a ambas asignaturas.
El compromiso del Gobierno cuando aprobó la Ley Orgánica de Educación (LOE) el pasado mes de abril fue reducir la carga horaria, al menos en los primeros cursos de secundaria, para que el cambio de etapa no sea tan brusco para el alumnado. Además, había que hacer sitio para las nuevas materias como educación para la ciudadanía.
La incorporación de esta nueva asignatura la ha pagado otra de su misma área de conocimiento, ciencias sociales y geografía e historia, que tendrá 20 horas menos en toda la ESO. También pierden carga horaria la tecnología (55 horas menos), Lengua extranjera (30 menos, aunque la segunda lengua extranjera puede pasar de optativa a obligatoria en 1º, 2º y 3º) y lengua y literatura castellana (con 10 horas menos).
Con el complemento horario de las comunidades autónomas, los alumnos cursan actualmente más de 200 horas de tecnología y más de 385 de ciencias sociales. En el caso de la lengua castellana, la horquilla está entre las 490 y las 595 horas.
Excepto en las comunidades con lengua cooficial, que ofrecen menos porque pueden restar un 10% a esta asignatura para impartir su lengua propia. Cuando se apruebe el borrador de real decreto, podrán detraer ese 10% de cualquiera de las asignaturas, no sólo de la lengua española.
Regular al detalle
Al paso de las últimas leyes educativas se han ido estrechando los márgenes para la organización de las enseñanzas que han de recibir los alumnos. Si la LOGSE organizaba los contenidos por ciclos, las siguientes -Ley de Calidad (PP) y la Ley Orgánica de Educación actual- han optado por regular al detalle qué se va a impartir y aprender en cada curso. Contrasta con la autonomía que, por otro lado, han ganado los centros escolares para diseñar sus actividades y los equipos directivos para ejercer sus funciones, tanto en materia de disciplina como organizativa.
Las materias de libre elección en 4º de la educación secundaria obligatoria (ESO), es otra puerta para la autonomía organizativa y del estudiantado que se cierra poco a poco. El horario previsto para estas materias -por ejemplo, biología y geología o física y química- ha perdido 15 horas.
La reducción global del horario, que hay que computar sobre todo a la religión, pero también a la lengua extranjera o las tecnologías, estaba ya prevista en la ley para suavizar el paso de los alumnos de la primaria a la secundaria, un salto que los expertos consideraban excesivo. En 1º y 2º de ESO los alumnos "cursarán como máximo dos materias que en el último curso de primaria", dice la LOE. Son chicos de 11 y 12 años los que pasan de una etapa a la otra. Ahora tendrán más tiempo para las matemáticas y las enseñanzas artísticas.