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• Amnistía reclama en Barcelona que la violencia sexista se trate como un tema de salud pública
• El Periódico de Catalunya, 2006-11-23 # Rafa Julve, Barcelona

El número de mujeres muertas este año a manos de sus parejas, 60, es la cifra más alta desde 1999. El Gobierno central impulsó hace dos años una ley para luchar contra la violencia machista, “pero esta norma tiene todavía muchas lagunas que impiden obtener mejores resultados”, ha denunciado esta mañana Esteban Beltrán, director de la sección española de Amnistía Internacional, en Barcelona.

El responsable de la oenegé, que ha presentado el informe "Hay que actuar a tiempo. Detección de la violencia de género y atención a las víctimas en el ámbito sanitario español", ha reclamado que este tipo de maltrato sea considerado como un tema de salud pública, “puesto que el 99% de las víctimas han visitado un centro sanitario en el transcurso de un año después de ser agredidas".

Beltrán ha calificado los CAP y hospitales como espacios esenciales para librar la batalla contra la violencia doméstica, y ha criticado que las directrices marcadas por la ley no se cumplen en numerosos puntos. “La norma indica que se deben establecer mecanismos de formación de los profesionales, cuando este año solo se han celebrado tres cursos para 25 personas cada uno”. Además, “no se ha fomentado la igualdad entre comunidades autónomas sobre este conflicto, e incluso hay tres autonomías, Catalunya, Madrid y Andalucía, que carecen de protocolos de actuación del personal sanitario ante un episodio de malos tratos”.

Sensibilizar a los profesionales sanitarios
Pilar Babí, médica de familia y miembro de la Societat Catana de Medicina Familiar i Comunitària, ha abundado en la necesidad de formar y sensibilizar a los profesionales sanitarios y ha aportado un dato alarmante: “Los datos del Instituto de la Mujer indican que el 11% de las mujeres han sufrido agresiones por parte de sus parejas. En cambio, en las salas de espera de los CAP y hospitales, estos números se disparan. Según diversos cuestionarios efectuados en los centros de salud puntos de España, entre el 25% y el 50% de las mujeres, dependiendo de la zona en que residen, son víctimas de la violencia sexista. Esto supera incluso el demonio de la hipertensión arterial".

Tanto Balbí como el responsable de Amnistía Internacional han exigido al Gobierno central que dé una mayor prioridad a la atención sanitaria y que establezca mecanismos que permitan detectar una agresión lo antes posible. Muchas mujeres se ahorrarían de esta manera los dolores físicos, las depresiones, los trastornos mentales y otros sufrimientos.