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• Dos bodas 'gays' y reivindicativas para hacer ver a las otras familias
• El País, 2006-07-10 # Jaime Prats, Valencia

Mientras miles de fieles abandonaban el lugar en el que habían asistido a la misa con la que Benedicto XVI despidió su visita a Valencia, en la otra punta de la ciudad comenzaba otra celebración muy distinta. Luisa Notario, responsable del Col.lectiu Lambda, la principal entidad autonómica de gays, lesbianas, bisexuales y transexuales, se casaba con su novia, Nuria Lobo. En la misma ceremonia, el número dos de la organización, Jose del Álamo, contraía matrimonio con Sergi Campillo.

"Evidentemente no ha sido una fecha elegida al azar", comentaba Notario. "Ante el encuentro de familias católicas queríamos visibilizar los otros modelos familiares que no han sido representados en los actos de este fin de semana". El lugar elegido fue finalmente un casal fallero -los locales donde las agrupaciones se reúnen- en el barrio de la Olivareta ante los problemas que se encontraron. El Ayuntamiento, del PP, les negó el permiso de celebrar la boda en cualquiera de los parques municipales, y la Generalitat, también del PP, impidió que fuera en el patio de un instituto, para el que tenían el visto bueno de la dirección y la inspección educativa.
Lambda es una de las decenas de entidades integrantes de la plataforma Jo no t'espere, que ayer calificó de éxito la campaña desplegada en contra de la visita del Pontífice a la ciudad. "Por un lado se ha demostrado que no toda Valencia ha participado del clamor popular por el Papa", comentaba ayer Ximo Cádiz, su portavoz. "Pero además hemos abierto un debate social sobre el significado del viaje, las opiniones de la Iglesia sobre la familia, la sexualidad, etcétera".

La página web de Internet ha registrado durante estas últimas semanas 400.000 visitas. "Han sido tantas que nos cobrarán más por el elevado uso del servidor", ironizó. Además, "para colmo", el moderado mensaje del Papa "que tampoco nos gusta", puntualiza Cádiz, "ha dejado al PP y la Conferencia Episcopal en la ultraderecha". La campaña como tal acabó ayer. Pero seguirán luchando por un Estado laico.