> Erreportajea: Eskubideak > EL "CIERRE DE FRONTERAS" REBAJA A LA MITAD LAS PETICIONES DE ASILO

• El «cierre de fronteras» rebaja a la mitad las peticiones de asilo
  Sólo el 4% de las 4.872 solicitudes estudiadas en 2005 fueron aceptadas, lamenta CEAR-Euskadi
• El Correo, 2006-06-21 # I. Ibáñez, Bilbao

El Día Mundial del Refugiado no merecía ayer una celebración alegre, a juicio de Javier Galparsoro, presidente de CEAR-Euskadi, que denunció en Bilbao la «política de sistemática denegación del derecho de asilo que siguen las autoridades». En España, en 2005 -con datos similares a los de 2004-, sólo se reconoció el estatuto de refugiado a 201 personas de las 4.872 solicitudes estudiadas (aunque se presentaron 5.254), es decir, al 4%. A otras 129 se les concedió una protección complementaria, pero el 93% quedó sin ninguna cobertura. «No estamos dando una solución, el panorama es desalentador», se quejaba Galparsoro.

Otro de los asuntos en los que el experto quiso hacer hincapié fue «el descenso en las solicitudes de asilo presentadas en los países desarrollados como consecuencia, sobre todo, de las políticas de cierre o blindaje de fronteras». En España, el año pasado, se presentaron 5.254 peticiones, frente a las 9.490 de 2001, «es decir, casi la mitad que hace cinco años». Sobre este punto se detuvo también, esta vez en Madrid, Ignacio Díaz de Aguilar, máximo responsable de CEAR a nivel estatal: «Esto se produce como consecuencia de acuerdos con terceros países, que imponen leyes de extranjería más duras que las de la propia Unión Europea». Como ejemplo citó a Marruecos, que, tras la crisis de la valla de Ceuta, «impuso leyes sin ninguna protección a los refugiados, a los que llegó a expulsar al desierto». «Las fronteras de la UE ya no están en Ceuta o Canarias, sino en Mauritania, y eso ha provocado la desprotección de refugiados que huyen de países en conflicto. Eso no elimina la corresponsabilidad de la UE con estas personas en una de sus mayores crisis humanitarias en 20 años», añadió.

Galparsoro, conmovido, se refirió a los «14 africanos que murieron saltando la valla junto a otros centenares de personas, entre las que había solicitantes de asilo, como reconoció el propio ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados). Eran habitantes de países vulneradores de la Convención de Ginebra que fueron engañados, a los que prometieron su expulsión a la Península y a los que, con mentiras, condujeron a Tánger. Desde allí nos llamaban desesperados», recuerda.

• Salir con lo puesto

El presidente de CEAR-Euskadi aportó también los datos del País Vasco: 86 solicitudes presentados y tan sólo 3 aceptadas: un colombiano y un iraní lograron el reconocimiento de refugiados y otro colombiano consiguió la protección complementaria. En los dos primeros casos fue necesario recurrir a la Audiencia Nacional, después de que el Gobierno denegara el asilo. «Más del 10% de las sentencias de la Audiencia Nacional sobre resoluciones del estatuto de refugiado fueron estimatorias, es decir, que concedieron el estatuto y corrigieron los criterios del Gobierno», señaló Galparsoro. Como otros años, hizo hincapié en la dificultad de demostrar con papeles la persecución a la que es sometida una persona, «sobre todo cuando muchas veces tienes que salir corriendo con lo puesto».

ACNUR ofreció rueda de prensa en Madrid, aunque se centró en un aspecto más positivo. Calificó la ley de asilo española como «un modelo y un referente» para Europa. Su representante en nuestro país, Carlos Boggio, aseguró que España plantea un procedimiento «clarísimo» para solicitar el estatuto de refugiado, «que le garantiza su permanencia aquí hasta el día en que voluntariamente decida repatriarse a su país de origen».